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Además, los calentadores de propano pueden convertirse en un peligro de incendio si se colocan cerca de materiales inflamables o se utilizan de forma inadecuada. Muchos modelos no están diseñados para su uso en espacios interiores y carecen de características de seguridad esenciales, como sensores de agotamiento de oxígeno o apagado automático, que son cruciales para un funcionamiento seguro. Para evitar estos peligros, es esencial utilizar calefactores diseñados específicamente para uso interior y garantizar una ventilación adecuada.
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