Un Curso Sobre Milagros
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Pero de lo que se olvidaron es que Dios no puede destruirse a Sí Mismo. La luz está realmente en ustedes.
UCSM TX 18.4 pár 24
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T18.4 [24] 1 Ustedes, que se han pasado la vida llevando la Verdad a la ilusión y la Realidad a la fantasía, han estado recorriendo el camino de los sueños. 2 Pues pasaron de estar despiertos a estar dormidos y de ahí, se han estado adentrando más y más en un sueño todavía más profundo. 3 Cada sueño los ha llevado a otros sueños, y cada fantasía que parecía arrojar una luz sobre la oscuridad no hizo sino hacerla aún más oscura. 4 La meta de ustedes era la oscuridad, en la que ningún rayo de luz pudiese penetrar. 5 Y buscaron una negrura tan absoluta, que pudiesen esconderse por siempre de la Verdad, en completa demencia. 6 Pero de lo que se olvidaron es que Dios no puede destruirse a Sí Mismo. 7 La luz1 está realmente en ustedes. 8 La oscuridad podrá envolverla, pero no extinguirla.
CH 18. EL SUEÑO Y LA REALIDAD
18.4 LUZ EN EL SUEÑO
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Un Curso Sobre Milagros
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Libro de Lecciones
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P A R T E 1
R E P A S O 6
Introducción
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LR6 (-L201) in.1 1 Para este repaso, utilizaremos sólo una idea por día y la practicaremos tan a menudo como podamos. 2 Además del tiempo que le dediques mañana y noche, que no debería ser menos de quince minutos, y de los recordatorios que has de realizar cada hora durante el transcurso del día, usa la idea tan frecuentemente como puedas entre estos recordatorios. 3 Cada una de estas ideas por sí sola sería suficiente para salvarse1, siempre que se aprendiese de verdad. 4 Cada una de ellas sería suficiente para liberarlos a ti y al mundo de todo cautiverio2 e invitar al recuerdo de Dios a que regrese3.
LR6 (-L201) in.2 5 Con esto en mente, demos comienzo a nuestras prácticas, en las que repasaremos detenidamente los pensamientos con los que el Espíritu Santo nos ha bendecido en nuestras últimas 20 lecciones. 6 Cada uno de ellos encierra dentro de sí el programa de estudios en su totalidad, si se comprende, practica, acepta y aplica a todo cuanto parece acontecer a lo largo del día. 7 Uno solo de ellos bastaría. 8 Pero, al aplicarlo, no se deben hacer excepciones. 9 Por lo tanto, necesitamos usarlos todos y permitir que se integren en uno solo, ya que cada uno de ellos contribuye a la totalidad de lo que queremos aprender.
LR6 (-L201) in.3 10 Al igual que nuestro último repaso, estas prácticas giran alrededor de un tema central con el que comenzamos y concluimos cada lección. 11 El tema para el presente repaso es el siguiente:
LR6 (-L201) in.4 12 No soy un cuerpo4. 13 Estoy libre, 14 pues5 sigo siendo Tal como Dios Me creó.
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1 La salvación: 1) es haber aprendido a pensar, percibir y actuar cada vez más pensando con el Espíritu Santo y cada vez menos con el ego y, así, haber liberado la fuerza de Dios en nosotros que está reverberando en todo lo que pensamos o hacemos; 2) es —por medio del perdón y de la extensión de milagros— haber reconocido en el otro, en los demás, y en la relación santa, a nuestro verdadero Yo, Cristo, ya que todos somos realmente Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Su Padre en el eterno Presente de Su Unicidad; 3) es haber aprendido lo que es la paz, porque la paz es la condición del Reino en nuestro fuero interno; 4) es haber buscado y hallado en el otro y en los demás, el reflejo del Amor de Dios, Amor que Él y Su Hijo comparten en el eterno Presente de la Unicidad en perpetua Armonía y alegre Concordia, extendiendo así la Creación; 5) es haber aprendido a dar paz y haber obtenido paz, porque la paz es la condición para: 5.1) alcanzar aquí el reflejo del Conocimiento; 5.2) en nuestro fuero interno, entrar en el mundo real, que es la meta de nuestro viaje con el Curso. Ver T8.4 [22], T9.6, T11.1, T15.4 [33], T17.3 [9], L71.2, LTe.2 (-L231)
2 … mental
3 … a tu espíritu o mente acertada, que es la otra parte de la mente del Hijo separado que todavía se puede comunicar con Dios por medio del Espíritu Santo. Ver T2.2 [20], T4.2 [8] y [19], T31.6, L97
4 … realmente, inventado por el ego primario para probar que el Amor o Dios no existe en esta realidad del tiempo y del espacio y de todo lo que éstos contienen, sino que todos, sin excepción, somos Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios. Esto no me lo puede explicar la razón, lógica y sentido común de mi ego, ya que él forma parte de mi cuerpo. Sólo el reflejo en mí, aquí, en el mundo real, del Amor de mi Alma por todas las demás Almas, puede hacerme experimentar la paz y la alegría que no son de este mundo…
5 … realmente
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pár 5-9
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LR6 (-L201) in.5 15 El día comienza y concluye con eso. 16 Y lo repetiremos asimismo cada vez que el reloj marque la hora, o siempre que nos acordemos, entre una hora y otra, que tenemos una función6 que transciende el mundo que vemos. 17 Aparte de esto y de la repetición del pensamiento que nos corresponda practicar cada día, no se requiere ningún otro tipo de ejercicio, excepto un profundo abandono de todo aquello que abarrota la mente y la hace sorda a la razón, a la cordura, y a la sencilla Verdad7.
LR6 (-L201) in.6 18 Nos vamos a proponer ir más allá de todas las palabras y de las formas especiales de practicar para este repaso. 19 Pues lo que vamos a intentar esta vez es ir más de prisa por una senda más corta que nos conduce a la serenidad y a la paz de Dios. 20 Simplemente cerramos los ojos y luego nos olvidamos de todo lo que creíamos que conocíamos y comprendíamos. 21 Pues así se nos da la libertad de todo lo que no conocíamos y no sabíamos comprender.
LR6 (-L201) in.7 22 Hay una sola excepción a esta falta de estructura. 23 No dejes pasar un solo pensamiento inútil8 sin confrontarlo. 24 Si adviertes alguno, niega su dominio sobre ti y apresúrate a asegurarle a tu mente que eso no es lo que ella quiere. 25 Luego deja tranquilamente que el pensamiento que negaste sea eliminado mediante un cambio seguro y rápido por la idea que estés practicando ese día.
LR6 (-L201) in.8 26 Cuando estés tentado, apresúrate a proclamar tu libertad de la tentación, diciendo:
LR6 (-L201) in.9 27 No quiero este pensamiento. 28 El que quiero es ____.
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6 Nuestra verdadera función es tratar de ser aquí un reflejo de lo que realmente somos todos en la eterna Unicidad: Almas, unificadas todas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios; reflejo que se logra en el instante santo del mundo real, después de haber aceptado el Redimir para sí mismo y luego, haber perdonado totalmente a otro y extendido los milagros sugeridos por el Espíritu Santo. A cada persona el Espíritu Santo le asigna una función especial en la salvación que sólo ella puede desempeñar, porque es una parte que le fue asignada únicamente a ella. Y el plan no se habrá llevado a término hasta que ella descubra cuál es su función especial, y desempeñe la parte que le fue asignada para completarse a sí misma en el otro y en los demás, en un mundo donde rige la incompletitud. Ver T18.6 [45], T20.5 [32], L62, L64, L65, L66, L99
7 … que nos comunica el Espíritu Santo por medio de los impulsos amorosos (o milagrosos) que de vez en cuando emergen de lo más profundo de nuestro subconsciente.
8 .. de tu ego, cuestionando y oponiéndose a tu verdadera Realidad, la Cual está más allá de todo razonamiento y lógica de ese ego.
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pár 10-11
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LR6 (-L201) in.10 29 Y luego, repite la idea del día y deja que ocupe el lugar de lo que habías pensado. 30 Además de estas aplicaciones especiales de la idea diaria, sólo añadiremos unas cuantas expresiones formales o pensamientos específicos para que te ayuden en tu práctica. 31 La diferencia es que entregamos estos momentos de quietud al Maestro9 Que nos enseña en silencio, nos habla de paz, e imparte a nuestros pensamientos10 todo el significado11 que puedan tener.
LR6 (-L201) in.11 32 A Él ofrezco este repaso por ti. 33 Te pongo a Su cargo y dejo que te enseñe qué hacer, decir y pensar cada vez que recurres a Él. 34 Él no fallará y estará a tu disposición cada vez que acudas a Él en busca de ayuda. 35 Ofrezcámosle todo este repaso que ahora comenzamos y no olvidemos también a Quién Le fue dado, a medida que practicamos día tras día, avanzando hacia la meta12 que Él fijó para nosotros, permitiéndole que nos enseñe cómo progresar y confiando plenamente en que nos indique la mejor manera de que cada práctica pueda convertirse en un amoroso presente de libertad13 para el mundo.
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9 … el Espíritu Santo…
10 … pensados con Él, con Su sistema de pensamiento,
11 Significado, con mayúscula es, en el eterno Presente de la Unicidad, el de la relación de Amor de Dios con Nosotros, como Almas unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo, en perfectas paz y alegría. En minúscula, cuando pensamos con el Espíritu Santo, significado es el reflejo aquí de ese eterno Significado y, cuando pensamos con el ego, es el significado que damos aquí a nuestra existencia separada, según las leyes de este mundo. Ver T2.2 [21], T2.6, T7.5 [26], T7.6 [46], T30.8, L14]
12 La meta del Curso: es aprender a pensar, percibir y actuar cada vez más con el Espíritu Santo y cada vez menos con el ego, de manera de liberar la fuerza de Dios en nosotros para que reverbere en todo lo que pensemos o hagamos; es —por medio del perdón y de la extensión de milagros— reconocer en el otro, en los demás, y en la relación santa, a nuestro verdadero Yo, Cristo, ya que todos somos realmente Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Su Padre en el eterno Presente de Su Unicidad; es liberarnos del pensar del ego para poder regresar a la Unicidad de Dios, de la Que realmente nunca nos hemos separado; es buscar y hallar en el otro y en los demás, el reflejo aquí del eterno Amor que Dios y Su Hijo comparten en la perpetua Armonía y alegre Concordia del Amor Que eternamente Se profesan Uno a Otro, extendiendo así la Creación; es aprender a dar paz para tener paz, porque la paz es la condición aquí para alcanzar el conocimiento, porque esa es la condición para entrar en el mundo real. Ver T17.7, T17.8, T22.7 [51], T31.2 [23], L127.6, L131.2
13 Libertad con mayúscula es, en la eterna Unicidad, la libre Voluntad de Dios de Amar o crear, Que es también la libre Voluntad de todos nosotros como Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, Su único hijo, de amar y ser amados. Aquí, en minúscula, libertad, cuando pienso "nos" con el Espíritu Santo, es la liberación del confinamiento impuesto por las mentes individuales separadas unas de otras, para amar sin excepción y por igual a todos, como reflejo de la Unicidad; y, cuando pienso con el ego, es lo que decido hacer con mi libre albedrío, según las leyes de la evolución y escasez. Ver T2.6 [109], T13.7 [62], T17.6 [52], L199, LR6 (-206)
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Un Curso Sobre Milagros
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Libro de Lecciones
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L E C C I Ó N 201
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No soy un cuerpo. Estoy libre,
pues sigo siendo Tal como Dios Me creó.
L201 (L181) 1 Confío en mis hermanos, que realmente son Uno Conmigo.
2 No hay nadie que no sea mi hermano. 3 He sido bendecido con la Unicidad1, con el Universo2 y con Dios Mi Padre, el único Creador de la Totalidad que es mi Yo3, el Cual es eternamente Uno Conmigo.
No soy un cuerpo. Estoy libre,
pues sigo siendo Tal como Dios Me creó.
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1 Unicidad, con mayúscula es sencillamente la idea de que Dios, en el eterno Presente del Cielo, está creando a Su único Hijo en un pensamiento de Amor o Espíritu Santo, Amor que se profesan eternamente Uno al Otro en perfecta armonía y alegre concordia. En minúscula, aquí, en nuestra mente acertada o espíritu, unicidad es la idea nacida del anhelo natural de, amorosamente, unificar todas nuestras Almas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios, en una experiencia en nuestro fuero interno, que nos dice que realmente no estamos solos, aislados y separados unos de otros, ni desamparados —como la percepción de nuestros cuerpos que el ego nos quiere hacer ver y creer— sino que realmente somos Uno con Dios en las perfectas Paz y Alegría de Su eterna Unicidad, arropados por el Amor o Espíritu Santo. Ver T8.5 [38], T10.2 [15], T26.2
2 Universo, con mayúscula, es sinónimo de la Unicidad de Dios, Cielo, Reino de los Cielos, Realidad, es decir, Todo lo creado por Dios, a saber: Nosotros como Almas perfectas y eternas, Una en Cristo, Su único Hijo, con Quien comparte como Uno Su Amor o Espíritu Santo en el eterno Presente de la Unicidad o Santísima Trinidad. No creó Más nada, por lo tanto no existe más nada realmente. En minúscula, universo puede significar todo lo que está contenido en el tiempo y el espacio según el ego o, si estás pensando con el Espíritu Santo, es el reflejo aquí de la Unicidad de Dios. Ver T28.3 [16], T29.7 [39]
3 Yo, con mayúscula, es el eterno Yo de Cristo, el Hijo único de Dios —en Quien todas nuestras Almas perfectas y eternas están unificadas como Una— Quien es Uno con Dios en el eterno Presente de Su Unicidad. También es usado pocas veces como el Yo de Dios. En minúscula, tu yo es el ego si estás pensando con él, el yo que creemos que somos en el tiempo y el espacio, el cual, en la separación, hicimos para reemplazar a la eterna Creación de Dios, es decir, a Su único Hijo; o si decidiste pensar con el Espíritu Santo, tu yo es el reflejo aquí del eterno Yo de Cristo, en Quien todos somos realmente Uno. Ver Lte.14 (-351)
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Un Curso Sobre Milagros
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Texto
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Capítulo 18
EL SUEÑO Y LA REALIDAD
T18.4 LUZ EN EL SUEÑO pár 24-31
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T18.4 [24] 1 Ustedes, que se han pasado la vida llevando la Verdad a la ilusión y la Realidad a la fantasía, han estado recorriendo el camino de los sueños. 2 Pues pasaron de estar despiertos a estar dormidos y de ahí, se han estado adentrando más y más en un sueño todavía más profundo. 3 Cada sueño los ha llevado a otros sueños, y cada fantasía que parecía arrojar una luz sobre la oscuridad no hizo sino hacerla aún más oscura. 4 La meta de ustedes era la oscuridad, en la que ningún rayo de luz pudiese penetrar. 5 Y buscaron una negrura tan absoluta, que pudiesen esconderse por siempre de la Verdad, en completa demencia. 6 Pero de lo que se olvidaron es que Dios no puede destruirse a Sí Mismo. 7 La luz1 está realmente en ustedes. 8 La oscuridad podrá envolverla, pero no extinguirla.
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1 Luz, con mayúscula, es el Conocimiento que Dios nos dio al crearnos mediante Su Pensamiento de Amor o Espíritu Santo. En minúscula, luz, cuando pensamos con el Espíritu Santo, es el reflejo aquí de esa Luz eterna, reflejo que llega a nuestro espíritu o mente acertada en un instante santo del mundo real, cuando hemos perdonado totalmente a otro u otros, y extendido los milagros que nos hubiese sugerido el Espíritu Santo; y, cuando pensamos con el ego, tiene todos los demás significados que podemos encontrar en el diccionario. Ver T5.8 [80], T12.2 [5], T22.7 [65], L48, L61, L63, L69, L93
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 25
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T18.4 [25] 9 A medida que la luz se les aproxime se lanzarán a la oscuridad huyendo de la Verdad, retirándose algunas veces en formas de menor miedo y, otras en el terror más absoluto. 10 No obstante avanzarán, pues su meta2 es pasar del miedo3 a la Verdad4. 11 Eso lo saben ustedes5. 12 La meta que aceptaron es la meta del conocimiento6, por la que dieron significado7 a su disposición de ir en pos de ella. 13 El miedo parece vivir en la oscuridad, y cuando tienen miedo es porque han retrocedido. 14 Así que juntémonos rápidamente en un instante de luz, y eso será suficiente para recordarles que su meta8 es realmente la luz. 15 La Verdad9 se ha apurado a encontrarse con ustedes desde el mismo momento en que ustedes La llamaron.
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2 … verdadera
3 El miedo es la motivación primordial del sistema de pensamiento del ego, constituye un síntoma de tu profundo sentido de ser atacado y de pérdidas pasadas, presentes y futuras. Pero cuando has aceptado el Redimir para ti mismo, perdonado y extendido los milagros que te ha sugerido el Espíritu Santo y, con la visión de Cristo, aceptas solamente los pensamientos amorosos de todos, considerando todo lo demás como pedimentos de ayuda, Él te enseñará que el miedo —tanto en ti como en los demás— es realmente un pedido de ayuda. Ver T8.9 [82], T8.10 [90], T8.10 [94]
4 La Verdad, con mayúscula, según el Curso —que realmente no soy un cuerpo sino un Alma, Tal como Dios me creó— no se puede describir ni tampoco explicar; sólo puede experimentarse, en un instante santo del mundo real en nuestro fuero interno, al haber logrado perdonar totalmente a otro y haber visto su Alma con la visión de Cristo. En esto radica aquí, la paz de Dios. Sus condiciones son querer creer que: 1) Dios existe, es perfecto y eterno, y en Su Pensamiento de Amor o Espíritu Santo, nos creó a todos —sin excepción y a Su Semejanza— Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo, Cristo, con Quien es Uno en la perpetua Armonía y alegre Concordia del Amor que Se profesan Uno a Otro en el eterno Presente de Su Unicidad; 2) Dios no creó más nada. 3) Por eso, nada de Ésta, Nuestra verdadera Realidad, puede ser amenazado, nada que no sea Ella, realmente existe. 4) En esto radica aquí, la paz de Dios. En minúscula, la verdad es la verdad del ego, cuyo sistema de pensamiento está basado en la creencia de que la percepción que tiene del tiempo y del espacio, y de todo lo que estos contienen, es que son reales, están regidos por las leyes de la evolución y escasez, y constituyen su única y verdadera realidad. Ver T7.5, T14, T30.5
5 … cuando han aceptado el Redimir para sí mismos: Aceptar para sí mismo el Redimir — siempre con mayúscula— es un acto de Amor; es reconocer el Alma del que perdonamos; es haberse decidido a pensar cada vez más "nos" con el Espíritu Santo y cada vez menos "yo", "yo", "yo" con el ego; es el acto de compartir desinteresadamente; es querer creer que la separación nunca ocurrió y, por lo tanto, no somos cuerpos sino realmente las Almas perfectas y eternas unificadas como Una en Cristo, el Hijo único Que Dios creó; es dejar de creer en la realidad del ego y querer creer en la Realidad, el eterno Presente de la Unicidad con Dios; es siempre una manera de escapar del miedo. Ver T2.2 [36], T2.5 [86, 103], T3.3, T5.3, L139
6 Conocimiento, con mayúscula, es lo que saben todas nuestras Almas perfectas y eternas, Unificadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios, Almas que están compartiendo con Dios, en perfectas paz y alegría, Su Amor o Espíritu Santo, en el eterno Presente de Su Unicidad. En minúscula, conocimiento, cuando pensamos con el Espíritu Santo, es lo que experimentamos en un instante santo del mundo real, al haber logrado perdonar totalmente a otro, con cuya Alma, La mía, ahora, es una; es saber que esa experiencia es el reflejo aquí del eterno Conocimiento. Y cuando pensamos con el ego, es lo que se puede llegar a conocer en este mundo, de acuerdo con sus leyes. Ver T3.5 [35] y [37], T25.4 [25]
7 Significado, con mayúscula es, en el eterno Presente de la Unicidad, el de la relación de Amor de Dios con Nosotros, como Almas unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo, en perfectas paz y alegría. En minúscula, cuando pensamos con el Espíritu Santo, significado es el reflejo aquí de ese eterno Significado y, cuando pensamos con el ego, es el significado que damos aquí a nuestra existencia separada, según las leyes de este mundo. Ver T2.2 [21], T2.6, T7.5 [26], T7.6 [46], T30.8, L14]
8 La meta del Curso: es aprender a pensar, percibir y actuar cada vez más con el Espíritu Santo y cada vez menos con el ego, de manera de liberar la fuerza de Dios en nosotros para que reverbere en todo lo que pensemos o hagamos; es —por medio del perdón y de la extensión de milagros— reconocer en el otro, en los demás, y en la relación santa, a nuestro verdadero Yo, Cristo, ya que todos somos realmente Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Su Padre en el eterno Presente de Su Unicidad; es liberarnos del pensar del ego para poder regresar a la Unicidad de Dios, de la Que realmente nunca nos hemos separado; es buscar y hallar en el otro y en los demás, el reflejo aquí del eterno Amor que Dios y Su Hijo comparten en la perpetua Armonía y alegre Concordia del Amor Que eternamente Se profesan Uno a Otro, extendiendo así la Creación; es aprender a dar paz para tener paz, porque la paz es la condición aquí para alcanzar el conocimiento, porque esa es la condición para entrar en el mundo real. Ver T17.7, T17.8, T22.7 [51], T31.2 [23], L127.6, L131.2
9 … el Espíritu Santo
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 26
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T18.4 [26] 16 Si supieran Quién camina al lado de ustedes a lo largo de este camino que escogieron, les sería imposible tener miedo. 17 No lo saben, porque el viaje hacia la oscuridad ha sido largo y cruel y se han adentrado profundamente en ella. 18 Un ligero parpadeo —después de haber tenido los ojos cerrados por tanto tiempo— no ha sido suficiente para darles confianza en ustedes mismos, por tanto tiempo despreciados. 19 Se dirigen hacia el Amor odiándolo todavía y, al mismo tiempo, terriblemente atemorizados de Su juicio sobre ustedes. 20 Y no se dan cuenta de que no es al Amor a lo que le tienen miedo, sino únicamente a lo que ustedes han hecho de Él. 21 Están avanzando hacia el significado del Amor y alejándose de todas las ilusiones con las que lo habían rodeado. 22 Cuando se refugian en lo ilusorio, su miedo se agudiza, pues no dudan que el significado que creen que tiene es aterrador. 23 No obstante, ¿qué importancia puede tener eso para nosotros que viajamos llenos de confianza y nos alejamos aprisa del miedo?
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 27
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T18.4 [27] 24 Ustedes, que sostienen cada uno la mano del otro, también sostienen la mía, pues cuando ustedes dos se unieron no estaban solos10. 25 ¿Creen acaso que los iba a dejar en la oscuridad que habían acordado abandonar conmigo? 26 En su relación está la luz de este mundo. 27 Y ahora que lo saben, el miedo tiene necesariamente que desaparecer de su vista. 28 No caigan en la tentación de sustraer el presente de la fe11 que se ofrecieron uno al otro. 29 Sólo conseguirían asustarse. 30 Este presente fue dado para siempre, pues Dios Mismo lo recibió. 31 No lo pueden retirar ahora, 32 ya que aceptaron a Dios. 33 La santidad12 de su relación está realmente establecida en el Cielo. 34 No comprenden lo que aceptaron, pero recuerden que no es necesario que comprendan. 35 Todo lo que se necesitó fue simplemente el anhelo de comprender. 36 Ese anhelo fue el deseo de ser santos. 37 La Voluntad de Dios13 les es concedida realmente, 38 pues desean Lo único que siempre tuvieron, o Lo que siempre fueron.
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10 La relación santa, aquí, 1) es el reflejo de la Relación de Amor de Dios en paz y alegría con todas las Almas perfectas y eternas que realmente somos, unificadas todas como Una en Cristo, Su único Hijo, en el eterno Presente de Su Unicidad; 2) es la fuente de la salvación para los integrantes de la relación especial, pues les va a permitir alejarse gradualmente del especialismo de sus egos y pensar y actuar cada vez más con sus espíritus o mentes acertadas; 3) es un proceso que se inicia cuando dos o más personas que, habiendo perdonado totalmente a otra(s), unen sus mentes en una meta común a favor de otro(s). Este proceso florece y fructifica cuando extienden a otros los milagros que el Espíritu Santo les sugiere; 4) finalmente, cuando en instantes santos en sus fueros internos, sus mentes acertadas experimentan el mundo real, se produce en ellas, a un profundo nivel subconsciente, una curación de los efectos del pensar y actuar con sus egos, haciendo que ahora, mediante la visión de Cristo, vean con Amor a todos y a todo. Ver T17.6, T22
11 Tener fe es creer en algo que nuestros sentidos no pueden verificar pero que pensamos que es verdad, porque nos lo asegura una autoridad en la materia en la que confiamos o, porque lo deducimos de nuestras propias experiencias. Las leyes de la evolución y de la escasez que rigen este mundo hacen que, para sobrevivir, el hombre racional actúe con egoísmo, aunque a veces, le dé por actuar irracionalmente con altruismo. A los actos de altruismo, el Curso los llama "milagros" y, además, nos propone que tengamos fe en que aquí, constituyen el reflejo del eterno Amor de Dios que inunda nuestros corazones. Basados en esa experiencia trascendente, el Curso nos propone deducir que ese Dios amoroso existe, es perfecto y eterno, y que, en Su Pensamiento de Amor o Espíritu Santo, nos creó a todos a Su Semejanza, Almas perfectas y eternas, unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo, con Quien es Uno en el eterno Presente de Su Unicidad. En Ésa, Su Realidad, Dios no creó más nada y, por eso, Allá, la realidad del ego —que nuestros sentidos perciben— no existe. Ver T17.7, T17.8, T19.1, T19.2, T21.4, L327)
12 Santidad, con mayúscula, es el Estado de perfecto Amor o Espíritu Santo que —como Alma, unificada con TODAS las demás Almas como Una en Cristo, el único Hijo de Dios— vivimos con Dios en perfectas Paz y Alegría, en el eterno Presente de Su Unicidad. En minúscula, santidad es la experiencia en mi fuero interno del reflejo aquí de ese Estado. Ver T1.1.31 [42] a [44], T2.2 [45], T5.4 [23], T14.5, L36, L37, L39
13 La Voluntad de Dios, en el eterno Presente de Su Unicidad —en la Que todas nuestras Almas perfectas y eternas están unificadas como Una en la única Alma del Hijo único de Dios— quiere que la felicidad que Su Hijo heredó de Él siga imperturbada: que sea perpetua en la Alegría de la Creación plena y que sea eternamente receptiva y completamente ilimitada en Él. Aquí, la Voluntad de Dios es que por medio del perdón y de la extensión de milagros, nos volvamos el reflejo de ese eterno Presente de la Unicidad, en la Que, en paz y con alegría, nos amamos unos a otros como uno en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Él. Ver T12.7 [64] y [65], T13.5 [41], L193
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 28
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T18.4 [28] 39 Cada instante que pasemos juntos les enseñará que esta meta es posible, y fortalecerá su anhelo de alcanzarla. 40 Y en el anhelo de ustedes reside que lo logren. 41 Su anhelo está completamente de acuerdo ahora con todo el poder de la Voluntad del Espíritu Santo. 42 Ninguno de los pasos cortos o vacilantes que puedan dar será capaz de separar ese anhelo de Su voluntad y de Su fuerza14. 43 Los llevo de la mano15 tan seguramente como ambos aceptaron llevarse uno y otro de la mano. 44 No se van a separar, pues estoy con ustedes y camino con ustedes en su progreso hacia la Verdad. 45 Y donde quiera que vayamos, llevamos a Dios con nosotros.
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14 Fuerza, con mayúscula, significa la Fuerza de Dios para crear o amar en el Cielo, una Fuerza que también dio a Su Hijo de manera que pudieran crear conjuntamente como Uno. En minúscula, fuerza —si estás pensando con el ego—significa la fuerza física o psicológica del ego para hacer cosas y, si en vez, estás pensando con el Espíritu Santo, quiere decir el reflejo aquí de la Fuerza de Dios y de Su Hijo de crear y amar. Ver T7.11, T29.9 [53], T31.8 [86], L42, L47
15 … en singular, porque es la mano de la relación especial en la que ahora, ambos son uno, es decir, que se ha transformado en santa...
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 29
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T18.4 [29] 46 En su relación santa, ustedes se han unido a mí para llevar el Cielo al Hijo de Dios, que se había ocultado en la oscuridad. 47 Han estado dispuestos a llevar la oscuridad a la luz y, esta disposición ha fortalecido a todos los que querían permanecer en la oscuridad. 48 Los que quieren ver verán. 49 Y se unirán a mí para llevar su luz a la oscuridad, una vez que la oscuridad que hay en ellos haya sido ofrecida a la luz y eliminada para siempre. 50 La necesidad que tengo de ustedes —unidos a mí en la santa luz de su relación— es la necesidad que tienen ustedes de salvación. 51 ¿Por qué iba a negarles lo que ustedes me dieron a mí? 52 Pues cuando se unieron unos con otros, me respondieron.
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T18.4 LUZ EN EL SUEÑO
pár 30-31
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T18.4 [30] 53 Ustedes, que ahora son los portadores de la salvación16, tienen la función de llevar la luz a la oscuridad17. 54 La oscuridad en ustedes ya fue llevada a la luz. 55 Desde el instante santo al que llevaron la oscuridad de ustedes, regresen ahora con esa luz a la oscuridad18. 56 Nos unimos en un todo cuando anhelamos unir las partes en un todo. 57 No permitan que el tiempo les preocupe, pues todo el miedo que están experimentando realmente ya no existe. 58 El tiempo ha sido reajustado para ayudarnos a lograr, juntos, lo que los pasados separados de ustedes habrían impedido. 59 Ustedes han transcendido el miedo, pues dos mentes no pueden unirse en su deseo de amar sin que el Amor19 se una a ellas.
T18.4 [31] 60 Ni una sola Luz en el Cielo deja de acompañarlos. 61 Ni20 uno solo de los Rayos que brillan para siempre en la Mente de Dios deja de iluminarlos. 62 El Cielo se les ha unido en su progreso hacia Él. 63 Cuando tan potente luz se les ha unido para infundir a la pequeña chispa del anhelo de ustedes el poder de Dios Mismo, ¿podrían acaso seguir en la oscuridad? 64 Están regresando juntos a casa, después del largo e insensato viaje que emprendieron cada uno por su cuenta y que no los condujo a ninguna parte. 65 Se han encontrado uno al otro, y cada uno alumbrará el camino del otro. 66 Y, partiendo de esa luz, los rayos magnos21 se extenderán hacia atrás a la oscuridad y hacia adelante hasta Dios, para con su resplandor desvanecer el pasado y así, hacer sitio a la eterna Presencia de Dios, en la Cual todo resplandece en la luz.
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16 ... por haberse unido en una relación santa
17 ... de los demás
18 … de sus hermanos
19 Amor, con mayúscula, se refiere, en la eterna Unicidad, al Espíritu Santo o eterno Amor de Dios que Él comparte con nosotros —como Almas unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo— y nosotros con Él en perpetua Armonía y alegre Concordia; y aquí, cuando pensamos con el Espíritu Santo, es Su reflejo o amor general y sin preferencias que tenemos para con los demás. En minúscula, amor se refiere al amor interesado y preferencial de nuestro ego, cuando pensamos con él. Ver P3 [2], T1.1.3 [3], T1.1.53 [100], T3.6 [38], L46, L67, L68, L195
20 … un reflejo aquí de
21 Los Rayos Magnos, con mayúscula, son sinónimos de la experiencia del Amor de Dios Que arropa a todas nuestras Almas, Una en Cristo, Que es lo que realmente somos en la eterna Unicidad de Dios, la Cual nunca abandonamos. En minúscula, los rayos magnos son el reflejo aquí de esa eterna experiencia, que también se vive como una chispa de Amor cuando reconocemos a Cristo en el otro en un instante santo del mundo real, después de haberlo perdonado totalmente y extendido los milagros sugeridos por el Espíritu Santo. Ver T15.9 [85], T16.7 [61] 21, T18.4 [31] 60
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