Monica es maestra en La Escuela Palapa desde hace un año.
Participa como docente a distancia y creadora de contenidos del Programa de Apoyo al Estudiante.
“Todo ha sido un proceso de adaptación y aprendizaje conjunto. La diferencia entre la Escuela Palapa y otras escuelas es el auténtico interés en generar un impacto en la vida de sus alumnos. La Palapa también demuestra interés y se involucra con la comunidad y las familias”.
La posibilidad de desarrollar programas innovadores en educación y trabajar en proyectos comunitarios es lo que más la motiva en la Escuela Palapa.
No poder brindar apoyo emocional directamente a los niños es el mayor desafío en esta pandemia.
Ya ha afectado a estudiantes con problemas socio emocionales.
Sin embargo, ella siente que lo que se ha aprendido es a ser resiliente y abiertos a nuevas formas de trabajar utilizando la tecnología y mantenerse conectado con las familias.