SHARE:  

PARA VER TODO EL CORREO HAGA
Un Curso Sobre Milagros
edición original
T19.5.1 [40] 1 El primer obstáculo que la paz debe salvar es el deseo de ustedes de deshacerse de ella1. 2 Pues no la pueden extender a menos que ustedes la conserven.

3 Ustedes son el centro desde donde ella irradia hacia afuera, llamando a los otros a entrar.

4 Ustedes2 son su hogar; la tranquila morada desde donde ella se extiende afablemente hacia afuera, aunque sin abandonarlos jamás.

5 Si ustedes la dejasen sin hogar, ¿cómo podría ella morar en el Hijo de Dios?

6 Si la paz se ha de diseminar por toda la creación3, tiene que empezar con ustedes, y extenderse desde ustedes a cada hermano que llamen, y llevarle descanso mediante su unión con ustedes.

  CH 19. MÁS ALLÁ DEL CUERPO
19.5.1 LOS OBSTÁCULOS A LA PAZ
PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE DE LA PAZ
gráfico por ©Deposit Photos 


Un Curso Sobre Milagros
edición original
Libro de Lecciones
P A R T E 1
R E P A S O 6
Introducción
LR6 (-L201) in.1 1 Para este repaso, utilizaremos sólo una idea por día y la practicaremos tan a menudo como podamos. 2 Además del tiempo que le dediques mañana y noche, que no debería ser menos de quince minutos, y de los recordatorios que has de realizar cada hora durante el transcurso del día, usa la idea tan frecuentemente como puedas entre estos recordatorios. 3 Cada una de estas ideas por sí sola sería suficiente para salvarse1, siempre que se aprendiese de verdad. 4 Cada una de ellas sería suficiente para liberarlos a ti y al mundo de todo cautiverio2 e invitar al recuerdo de Dios a que regrese3.

LR6 (-L201) in.2 5 Con esto en mente, demos comienzo a nuestras prácticas, en las que repasaremos detenidamente los pensamientos con los que el Espíritu Santo nos ha bendecido en nuestras últimas 20 lecciones. 6 Cada uno de ellos encierra dentro de sí el programa de estudios en su totalidad, si se comprende, practica, acepta y aplica a todo cuanto parece acontecer a lo largo del día. 7 Uno solo de ellos bastaría. 8 Pero, al aplicarlo, no se deben hacer excepciones. 9 Por lo tanto, necesitamos usarlos todos y permitir que se integren en uno solo, ya que cada uno de ellos contribuye a la totalidad de lo que queremos aprender.

LR6 (-L201) in.3 10 Al igual que nuestro último repaso, estas prácticas giran alrededor de un tema central con el que comenzamos y concluimos cada lección. 11 El tema para el presente repaso es el siguiente:

LR6 (-L201) in.4 12 No soy un cuerpo4. 13 Estoy libre, 14 pues5 sigo siendo Tal como Dios Me creó.
1 La salvación es salvar al otro, porque —siendo su Alma la misma que La tuya— al salvar a su mente del ego, salvas a la tuya también. La salvación es un proceso que: 1) se inicia cuando ayudas al otro a concienciar que, además de pensar “yo”, “yo”, “yo” con su ego sobrevividor, también posee la alternativa de pensar “nos” a favor de otro(s), siempre y cuando le ponga cuidado a los impulsos amorosos (o milagrosos) que de vez en cuando emergen de su subconsciente. 2) Luego, pensando cada vez más “nos” —que es el sistema de pensamiento del Espíritu Santo— lo llevará también cada vez más a perdonar a otro(s) y a extenderle(s) los milagros que el mismo Espíritu Santo le sugerirá. 3) Al multiplicarse estas experiencias, querrá creer que constituyen aquí un reflejo del eterno Amor de Dios por Su Hijo único —Que realmente somos— y que curará en su mente, todo pesar y dolor, todo miedo y toda pérdida, que creía que eran reales, y que sufría debido a la lealtad que les profesaba. Ver T6.6.3 [94], T7.5, T11, T14, T22, T23.2 [13], T29.8, T31, L39, LTe.2 (-L231)
 
2 … mental
 
3 … a tu espíritu o mente acertada, que es la otra parte de la mente del Hijo separado que todavía se puede comunicar con Dios por medio del Espíritu Santo. Ver T2.2 [20], T4.2 [8] y [19], T31.6, L97
 
4 realmente, inventado por el ego soñador para probar que el Amor o Dios no existe en esta realidad del tiempo y del espacio y de todo lo que éstos contienen, sino que todos, sin excepción, somos Almas perfectas y eternas, fusionadas como Una en Cristo, el Hijo único de Dios. Esto no me lo puede explicar la razón, lógica y sentido común de mi ego, ya que él forma parte de mi cuerpo. Sólo el reflejo en mí, aquí, en el mundo real, del Amor de mi Alma fusionadas como Una con todas las demás Almas, es lo que puede hacerme experimentar la paz y la alegría que no son de este mundo…
 
5 … realmente
P A R T E 1
R E P A S O 6
pár 5-10
LR6 (-L201) in.5 15 El día comienza y concluye con eso. 16 Y lo repetiremos asimismo cada vez que el reloj marque la hora, o siempre que nos acordemos, entre una hora y otra, que tenemos una función6 que transciende el mundo que vemos. 17 Aparte de esto y de la repetición del pensamiento que nos corresponda practicar cada día, no se requiere ningún otro tipo de ejercicio, excepto un profundo abandono de todo aquello que abarrota la mente y la hace sorda a la razón, a la cordura, y a la sencilla Verdad7.

LR6 (-L201) in.6 18 Nos vamos a proponer ir más allá de todas las palabras y de las formas especiales de practicar para este repaso. 19 Pues lo que vamos a intentar esta vez es ir más de prisa por una senda más corta que nos conduce a la serenidad y a la paz de Dios. 20 Simplemente cerramos los ojos y luego nos olvidamos de todo lo que creíamos que conocíamos y comprendíamos. 21 Pues así se nos da la libertad de todo lo que no conocíamos y no sabíamos comprender.

LR6 (-L201) in.7 22 Hay una sola excepción a esta falta de estructura. 23 No dejes pasar un solo pensamiento inútil8 sin confrontarlo. 24 Si adviertes alguno, niega su dominio sobre ti y apresúrate a asegurarle a tu mente que eso no es lo que ella quiere. 25 Luego deja tranquilamente que el pensamiento que negaste sea eliminado mediante un cambio seguro y rápido por la idea que estés practicando ese día.

LR6 (-L201) in.8 26 Cuando estés tentado, apresúrate a proclamar tu libertad de la tentación, diciendo:

LR6 (-L201) in.9 27 No quiero este pensamiento. 28 El que quiero es ____.

LR6 (-L201) in.10 29 Y luego, repite la idea del día y deja que ocupe el lugar de lo que habías pensado. 30 Además de estas aplicaciones especiales de la idea diaria, sólo añadiremos unas cuantas expresiones formales o pensamientos específicos para que te ayuden en tu práctica. 31 La diferencia es que entregamos estos momentos de quietud al Maestro9 Que nos enseña en silencio, nos habla de paz, e imparte a nuestros pensamientos10 todo el significado11 que puedan tener.
6 A cada persona —a la medida de sus talentos naturales y adquiridos— el Espíritu Santo le asigna una función especial en la salvación de los otros que Él le envía, función que sólo ella puede desempeñar extendiendo los milagros que Él le sugiera. Esta función se puede manifestar, entre otras: dando el ejemplo, enseñando, curando, ofreciendo psicoterapia, escribiendo, etc. Pero, siempre reflejará, de alguna manera, la Unicidad de Dios, en la que todas nuestras Almas están fusionadas en Una sola en Cristo, el Hijo único de Dios Que, realmente, cada uno y todos somos. Ver T18.6 [45], T20.5 [32], T25.7, L62, L64, L65, L66, L99
 
7 … que nos comunica el Espíritu Santo por medio de los impulsos amorosos (o milagrosos) que de vez en cuando emergen de lo más profundo de nuestro subconsciente.
 
8 .. de tu ego, cuestionando y oponiéndose a tu verdadera Realidad, la Cual está más allá de todo razonamiento y lógica de ese ego.
 
9 … el Espíritu Santo…
 
10 … pensados con Él, con Su sistema de pensamiento,
 
11 Significado, con mayúscula es, en el eterno Presente de la Unicidad, el de la relación de Amor de Dios con Nosotros, como Almas fusionadas en Una sola en Cristo, Su único Hijo, en perfectas paz y alegría. En minúscula, cuando pensamos con el Espíritu Santo, significado es el reflejo aquí de ese eterno Significado y, cuando pensamos con el ego, es el significado que damos aquí a nuestra existencia separada, según las leyes de este mundo. Ver T2.2 [21], T2.6, T7.5 [26], T7.6 [46], T30.8, L14
P A R T E 1
R E P A S O 6
pár 11
LR6 (-L201) in.11 32 A Él ofrezco este repaso por ti. 33 Te pongo a Su cargo y dejo que te enseñe qué hacer, decir y pensar cada vez que recurres a Él. 34 Él no fallará y estará a tu disposición cada vez que acudas a Él en busca de ayuda. 35 Ofrezcámosle todo este repaso que ahora comenzamos y no olvidemos también a Quién Le fue dado, a medida que practicamos día tras día, avanzando hacia la meta12 que Él fijó para nosotros, permitiéndole que nos enseñe cómo progresar y confiando plenamente en que nos indique la mejor manera de que cada práctica pueda convertirse en un amoroso presente de libertad13 para el mundo.
12 La meta del Curso: 1) es aprender a pensar, percibir y actuar cada vez más con el Espíritu Santo y cada vez menos con el ego, de manera de liberar la fuerza de Dios en nosotros para que reverbere en todo lo que pensemos o hagamos; 2) es —por medio del perdón y de la extensión de milagros— reconocer en el otro, en los demás, y en la relación santa, a nuestro verdadero Yo, Cristo, ya que todos somos realmente Almas perfectas y eternas, fusionadas en Una sola en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Su Padre en el eterno Presente de Su Unicidad; 3) es liberarnos del pensar del ego para poder regresar a la Unicidad de Dios, de la Que realmente nunca nos hemos separado; 4) es buscar y hallar en el otro y en los demás, el reflejo aquí del eterno Amor que Dios y Su Hijo comparten en la perpetua Armonía y alegre Concordia del Amor Que eternamente Se profesan Uno a Otro, extendiendo así la Creación; 5) es aprender a dar paz para tener paz, porque la paz es la condición aquí para alcanzar el conocimiento, porque esa es la condición para entrar en el mundo real. Ver T17.7, T17.8, T22.7 [51], T31.2 [23], L127.6, L131.2
 
13 Libertad con mayúscula, es, en la eterna Unicidad, la libre Voluntad de Dios de Amar o crear, Que es también la libre Voluntad de todos nosotros como Almas perfectas y eternas, fusionadas en Una sola en Cristo, Su único hijo, de amar y ser amados. Aquí, en minúscula, libertad, cuando pienso con el Espíritu Santo, es la liberación del confinamiento impuesto por las mentes individuales separadas unas de otras, para amar sin excepción y por igual a todos, como reflejo de la Unicidad; y, cuando pienso con el ego, es lo que decido hacer con mi libre albedrío, según las leyes de la evolución y escasez. Ver T2.6 [109], T13.7 [62], T17.6 [52], L199, LR6 (-206)


Un Curso Sobre Milagros
edición original
Libro de Lecciones
P A R T E 1 ~ R E P A S O 6
L E C C I Ó N 216
[Repasar las leccione 196]
No soy un cuerpo. Estoy libre,
pues sigo siendo Tal
como Dios Me creó.
 
L216 (L196) 1 No es sino a mí mismo a quien crucifico.
 
2 Todo lo que hago, me lo hago a mí mismo. 3 Si ataco, sufro. 4 Pero, si perdono1, la salvación me será dada.
 
No soy un cuerpo. Estoy libre,
pues sigo siendo Tal
como Dios Me creó.
1 El perdonar —que forma parte del proceso de aceptar el Redimir para uno mismo—en un primer paso, es concienciar que la causa de mis sufrimientos y dolor no se encuentra en el otro que estoy tratando de perdonar, sino en el sistema de pensamiento del ego hecho por mi yo soñador, y el especialismo producido por mi mente separada que lo usa. En un segundo paso, decido pensar con el Espíritu Santo y trato de ver más bien su Alma. El tercer paso se da, cuando conciencio que su Alma no tuvo nada que ver con lo que su cuerpo me pudo haber hecho, porque en la Unicidad —que es Donde quiero creer que realmente estamos todos como Almas, fusionadas en Una sola en Cristo— sólo hay Amor entre Dios y Su único Hijo. El último paso se da cuando, habiendo logrado perdonar a ese otro, voy a vivir la divina experiencia de Cristo o de Amor de la fusión de su Alma con la Mía, es decir, la experiencia del mundo real, que luego, trataré de extender a todo y a todos. Ver T16, T17.7, T29.7, L121. L122, LTe.1 (-221)


Un Curso Sobre Milagros
edición original
TEXTO
Capítulo 19
MÁS ALLÁ DEL CUERPO

T19.5 LOS OBSTÁCULOS
A LA PAZ
INTRODUCCIÓN pár 37-39
T19.5.in [37] 89 A medida que esta paz28 se expanda desde lo más profundo de ustedes para abrazar a toda la Filiación y ofrecerle descanso, se topará con muchos obstáculos. 90 Algunos tratarán de imponerlos ustedes. 91 Otros parecerán provenir de otras partes: de sus hermanos y de diversos aspectos del mundo externo. 92 No obstante, la paz los cubrirá afablemente, extendiéndose más allá de ellos completamente libre. 93 La extensión del propósito del Espíritu Santo29 desde la relación de ustedes a otros, para incluirlos amablemente en ella, ya ha comenzado. 94 Esta es la manera en que Él armonizará medios y fin. 95 La paz que Él depositó profundamente en los dos, se extenderá tranquilamente a cada aspecto de sus vidas, rodeándolos de radiante felicidad y con la pausada concienciación de estar completamente protegidos. 96 Y llevarán su mensaje de Amor, seguridad y libertad a todo aquel que se acerque al templo de ustedes, donde la curación30 lo está esperando.
27 … que ahora se ha vuelto santa,
 
28 Paz, con mayúscula, es el estado en el que nos encontramos en el eterno Presente de la Unicidad por ser amados y amar, es saber que realmente no somos cuerpos sino Almas, fusionadas todas en Una sola en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Su Padre, en perfecta quietud y perfecta libertad de todo peligro, conflicto, culpa o escasez. En minúscula, cuando pensamos y percibimos con el Espíritu Santo, paz es el estado que experimentamos en el mundo real cuando hemos perdonado totalmente al otro —es decir, que nos damos cuenta de que no hay nada que perdonar, porque lo hemos reconocido como el Cristo que realmente es, como el Alma perfecta y eterna que realmente es, Alma que es exactamente igual a La mía y a Las de todos los demás— y extendido los milagros que nos ha sugerido el Espíritu Santo. Pero cuando pensamos con el ego, paz es el estado que se puede obtener transitoriamente según los acuerdos y leyes del mundo. Ver T6.6.2, T19.5, T29.7, L105, L188, L200, M11, M20
 
29 El propósito del Espíritu Santo: 1) es que aprendamos a pensar, percibir y actuar cada vez más con Él y cada vez menos con el ego, de manera de liberar el Amor de Dios en nosotros para que reverbere en todo lo que pensemos y hagamos; 2) es —por medio del perdonar y de extender milagros a otro— experimentar en nuestro fuero interno el Alma del otro; 3) es, en la relación santa, reconocer a nuestro verdadero Yo, Cristo, en Quien todas las Almas perfectas —que realmente somos— están fusionadas como Una; 4) es liberarnos del pensar del ego para poder regresar aquí, al reflejo del eterno Presente de la Unicidad de Dios, de la Que realmente nunca nos hemos separado; 5) es buscar y hallar en el otro y en los demás, el reflejo aquí del eterno Amor que Dios y Su Hijo comparten en el Cielo, extendiendo así la Creación; 6) es aprender a dar paz para tener paz, porque la paz es la condición aquí para alcanzar el conocimiento, porque esa es la condición para entrar en el mundo real. Ver T5, T11.8, T17.7, T17.9, T25.2 [9]
 
30 Curación es el estado mental que se logra al final del proceso de curar en el que nuestra mente —ahora pensando y percibiendo con el Espíritu Santo— es llevada al mundo real y a la unión con todas las demás mentes en la experiencia de Cristo; y en el instante santo de esa experiencia, ella se cura de la creencia en la realidad del tiempo y del espacio, del pensar del ego, en la que somos cuerpos separados unos de otros y de Dios. Ver T2.3, T5, T8.9, T13.2, T17, M22, M23
T19.5 LOS OBSTÁCULOS
A LA PAZ
INTRODUCCIÓN
pár 38
T19.5.in [38] 97 No tendrán que esperar para dárselo, pues lo llamarán y él les responderá, reconociendo en la llamada de ustedes el Llamamiento de Dios31. 98 Y lo albergarán y le darán descanso tal como les fue dado a ustedes. 99 Todo eso harán. 100 No obstante, primero deberán expandir la paz que ya mora en lo más profundo de sus fueros internos32, transponiendo los obstáculos que habían colocado ante ella. 101 Esto harán, pues nada que se emprenda con el Espíritu Santo queda inconcluso. 102 Ciertamente no pueden estar seguros de nada de lo que ven fuera de ustedes, pero de lo que sí pueden estar seguros es de lo siguiente: el Espíritu Santo les pide que Le ofrezcan un lugar de reposo donde ustedes puedan descansar en Él33. 103 Él les respondió y, al hacerlo, entró a formar parte de su relación34. 104 ¿No querrían corresponder ahora a Su gracia35 entablando una relación con Él? 105 Pues fue Él Quien ofreció a la relación de ustedes el presente de la santidad, sin la cual les habría resultado eternamente imposible apreciarse uno al otro36.
31 El Llamamiento de Dios, es la voz del Espíritu Santo que se manifiesta por medio de los impulsos milagrosos que envía a tu pensar o mente acertada, para avivar tu voluntad a que cures la separación que hay entre tú y tus hermanos, y entre todos ustedes y Dios. Para ello, previamente, tienes que aceptar el Redimir para ti mismo, ponerte a perdonar y a extender los milagros que te sugiera el propio Espíritu Santo. Ver T5.3 [16], [19] y [20], T5.4, T27.3 [18]
 
32 El residuo bendito es la memoria o reflejo que llevamos en lo profundo de nuestro subconsciente, del arropamiento del Amor de Dios a todos cual Almas, unificadas como Una en Cristo, Su único Hijo, en Su eterna Unicidad. Este reflejo se nos manifiesta en nuestro fuero interno mediante impulsos caritativos, compasivos, de compartir, de amor o amistad desinteresados que de vez en cuando emergen de nuestro subconsciente, y que sólo podemos tomar en serio cuando nos ponemos a pensar con el Espíritu Santo en nuestro espíritu (o mente acertada), que es la parte de nuestra mente que todavía puede comunicarse con Dios por medio del Espíritu Santo. Ver T5.7 [60] 7, T8.5 [33], T12.3 [11], T18.11 [98], T28.2
 
33 … en nuestro espíritu, que es la parte de nuestra mente que todavía se puede comunicar con Dios por medio del Espíritu Santo.
 
34 … cambiando su relación de especial a santa, aceptando el Redimir para sí mismos, perdonando y extendiendo milagros. La relación santa, aquí: 1) es el reflejo de la Relación de Amor de Dios en paz y alegría con todas las Almas perfectas que realmente somos, fusionadas todas en Una sola en Cristo, Su único Hijo, en el eterno Presente de Su Unicidad; 2) es la fuente de la salvación para los integrantes de la relación especial, pues les va a permitir alejarse gradualmente del especialismo de sus egos y pensar y actuar cada vez más con sus espíritus o mentes acertadas; 3) es un proceso que se inicia cuando dos personas que han perdonado totalmente a otra(s), unen sus mentes en una meta común a favor de otro(s); este proceso florece y fructifica cuando extienden a otros los milagros que el Espíritu Santo les sugiere; 4) finalmente, cuando en instantes santos en sus fueros internos, dos experimentan el mundo real, se produce en ellos, a un profundo nivel subconsciente, una curación de los efectos del pensar y actuar con sus egos, haciendo que ahora, mediante la visión de Cristo, vean con Amor en paz y alegría a todos y a todo. Ver T17.6, T22
 
35 El Estado de Gracia (o Gracia), con mayúscula, es nuestro Estado natural de perfectas paz y alegría en el eterno Presente de la Unicidad de Dios, en La que todos —como las Almas perfectas que realmente somos— estamos fusionados en Una sola en Cristo, Su único Hijo. En minúscula, estado de gracia (o gracia), aquí: 1) es el reflejo de ese eterno Estado natural de paz y alegría que experimentamos en nuestro fuero interno, en un instante santo, después de haber dejado de juzgar, de haber perdonado y de haber extendido los milagros que nos hubiere sugerido el Espíritu Santo; 2) es la Respuesta de Dios a la separación por medio de los impulsos milagrosos que, cuando decidimos identificarnos con nuestra Alma (o Espíritu) y los tomamos en cuenta, restauran a nuestro consciente: 2.1) todas las memorias que nuestra mente dormida había olvidado y, 2.2) toda la certeza que nos aporta la fe acerca del significado del Amor. Ver T3.3 [24], T7.12 [108], L168, L169
 
36 .. como Cristo que somos…
T19.5   LOS OBSTÁCULOS
A LA PAZ
INTRODUCCIÓN
pár 39
T19.5.in [39] 106 Él sólo les pide que acepten por Él la gratitud que Le deben. 107 Y cuando se miran uno al otro con amable deferencia, es a Él a Quien están mirando. 108 Pues están mirando allí donde Él está37, y no separado de ustedes. 109 No pueden ver al Espíritu Santo, pero a sus hermanos como son de verdad38. 110 Y la luz39 en ellos les mostrará todo lo que necesiten ver. 111 Cuando la paz que mora en ustedes se haya extendido hasta abarcar a todos y cada uno, la función del Espíritu Santo aquí se habrá cumplido. 112 ¿Qué necesidad habrá de ver entonces? 113 Cuando Dios Mismo haya dado el paso final, el Espíritu Santo reunirá todos los agradecimientos y gratitud que ustedes Le han ofrecido, y los depositará tranquilamente ante Su Creador en el Nombre de Su santísimo Hijo. 114 Y el Padre los aceptará en Su Nombre. 115 ¿Qué necesidad habrá de ver, en presencia de Su gratitud?
37 … en su relación santa, ahora que los dos son uno en Cristo,
 
38 … por medio de la visión de Cristo es, en un instante santo en mi fuero interno, la que mira más allá del cuerpo de la persona que quiero perdonar y, cuando logro acceder al mundo real, ve su Alma perfecta y eterna fusionada con La mía como Una, fusión unitaria que incluye a todas las Almas, en la experiencia de Cristo, nuestra verdadera Identidad. Basado en esa experiencia, cada vez que decida pensar con el Espíritu Santo, es decir, pensar con mi mente acertada, voy a percibir el mundo de otra manera, en la que, en mi fuero interno, no hay nada que no justifique perdonar completamente, extender los milagros que sugiera el Espíritu Santo y unirme a esa y otras personas, en relaciones santas. Ver T11.7, T12.5 [42]
 
39 Luz, con mayúscula, es el Conocimiento que Dios nos dio al crearnos mediante Su Pensamiento de Amor o Espíritu Santo. En minúscula, luz, cuando pensamos con el Espíritu Santo, es el reflejo aquí de esa Luz eterna, reflejo que llega a nuestro espíritu o mente acertada en un instante santo del mundo real, cuando hemos perdonado totalmente a otro u otros, y extendido los milagros que nos hubiese sugerido el Espíritu Santo; y, cuando pensamos con el ego, tiene todos los demás significados que podemos encontrar en el diccionario. Ver T5.8 [80], T12.2 [5], T22.7 [65], L48, L61, L63, L69, L93


Un Curso Sobre Milagros
edición original
TEXTO
Capítulo 19
 MÁS ALLÁ DEL CUERPO

T19.5.1 LOS OBSTÁCULOS A LA PAZ
PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE
DE LA PAZ pár 40-48
T19.5.1 [40] 1 El primer obstáculo que la paz debe salvar es el deseo de ustedes de deshacerse de ella1. 2 Pues no la pueden extender a menos que ustedes la conserven. 3 Ustedes son el centro desde donde ella irradia hacia afuera, llamando a los otros a entrar. 4 Ustedes2 son su hogar; la tranquila morada desde donde ella se extiende afablemente hacia afuera, aunque sin abandonarlos jamás. 5 Si ustedes la dejasen sin hogar, ¿cómo podría ella morar en el Hijo de Dios? 6 Si la paz se ha de diseminar por toda la creación3, tiene que empezar con ustedes, y extenderse desde ustedes a cada hermano que llamen, y llevarle descanso mediante su unión con ustedes.
1 … mientras la relación de ustedes se mantenga "especial": La relación especial, aquí: 1) es en la que, pensando, percibiendo y actuando con nuestro ego, entablamos con una o más personas especiales que poseen atributos especiales, con las cuales esperamos llenar nuestras necesidades igualmente especiales; 2) constituye la renuncia a la eterna y alegre concordia del perfecto Amor que nuestras Almas profesan unas con otras fusionadas en Una sola en Cristo, el Hijo único de Dios, Que realmente somos; 3) es el intento del ego de asegurar para sí el especialismo que Dios le negó, nacido del deseo oculto de que Dios amara a Su Hijo, ahora separado, con un amor especial; 4) es el insincero interés, amor, amistad o aprecio por otra u otras personas que nuestro ego utiliza para constituir con ellas relaciones por medio de las cuales alcanzar algunos de sus objetivos personales; 5) a veces, estas relaciones especiales devienen en dependencia o codependencia, pero que, en todo caso, siempre constituyen ataques velados. Ver T15.6aT15.10, T16
 
2 … su espíritu, la parte de nuestras mentes que todavía se puede comunicar con Dios por medio del Espíritu Santo,
 
3 En el Cielo, la Creación, con mayúscula, es todo lo que Dios ha creado, a saber: Nosotros, las Almas perfectas y eternas, fusionadas en Una sola en Cristo, Su único Hijo, con Quien comparte como Uno Su Amor o Espíritu Santo en el eterno Presente de Su Unicidad. Dios no creó más nada. Por eso, Allá, la realidad del ego que percibimos aquí con nuestros sentidos, realmente, no existe. Aquí, las creaciones, en minúscula, cuando decidimos identificarnos con nuestra Alma (o Espíritu) y pensamos con el Espíritu Santo, son las que producimos al perdonar a otro(s) y extenderle(s) los milagros que nos sugiera el Espíritu Santo— como un reflejo de las Creaciones que creamos como Uno con y en Dios, en el Cielo. Y, cuando pensamos con el ego, no "creamos" sino que "hacemos," de acuerdo con las leyes de este mundo. Ver T2.1 [5], T14.4 [36], T30.3 [35], LTe.11 (-L321)
T19.5.1 PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE
DE LA PAZ
pár 41-42
T19.5.1 [41] 7 ¿Por qué querrían dejar a la paz sin hogar? 8 ¿De qué creen que tendría que desprenderse para poder morar con ustedes? 9 ¿Cuál parece ser el costo que tanto se resisten a pagar? 10 La pequeña barrera de arena todavía se interpone entre ustedes. 11 ¿La reforzarían ahora? 12 No se les pide que la quiten sólo para ustedes. 13 Cristo4 se los pide para Él Mismo. 14 Él quiere llevar paz a todos y cada uno, pero ¿cómo podría hacerlo si no es a través de ustedes? 15 ¿Dejarían que un pequeño banco de arena, un muro de polvo, una diminuta barrera aparente se interpusiese entre sus hermanos y la salvación5? 16 Y, sin embargo, este diminuto residuo de atacarse uno al otro que todavía estiman, constituye el primer obstáculo con el que la paz que mora en ustedes6 se topa en su avance hacia adelante. 17 Este pequeño muro de odio todavía quiere oponerse a la Voluntad de Dios7 y mantenerla limitada.

T19.5.1 [42] 18 El propósito del Espíritu Santo se encuentra en paz dentro de ustedes. 19 No obstante, aún no están dispuestos a dejar que se les una completamente. 20 Todavía se oponen en algo a la Voluntad de Dios. 21 Y ese algo constituye un límite que quieren imponerle al todo. 22 La Voluntad de Dios es Una, no muchas. 23 No tiene oposición, pues fuera de Ella realmente no hay ninguna otra. 24 Lo que ustedes todavía quieren represar detrás de su pequeña barrera y mantener separado de uno y de otro parece ser más poderoso que el Universo8, pues quiere retener a Éste y a Su Creador. 25 Este muro insignificante pretende ocultar el propósito del Cielo y, además, mantenerlo alejado del Cielo.
4 Cristo: 1) es la idea que resuelve el aparente dilema en el Curso, que, por un lado, reza: "Dios creó a un solo Hijo, y no creó más nada" y, por el otro, "la Filiación es la suma de todas las Almas creadas por Dios.", dilema que es resuelto en el proceso de extender milagros: "Un milagro hace que las Almas sean una en Cristo."; 2) en mi fuero interno, Cristo también es la divina experiencia de mi mente acertada o espíritu en un instante santo del mundo real, de la fusión de mi Alma con el Alma del otro(a), experiencia de Amor general que se extiende a todas las demás Almas como reflejo aquí del eterno Presente de la Unicidad de Dios. Ver T1.1.19 [19], [45] y [48], T2.2 [20], T30.6 [63], T31.1 [9]
 
5 La salvación es salvar al otro, porque —siendo su Alma la misma que La tuya— al salvar a su mente equivocada del ego, salvas a la tuya también. La salvación es un proceso que: 1) se inicia cuando ayudas al otro a concienciar que, además de pensar “yo”, “yo”, “yo” con su ego sobrevividor, también posee la alternativa de pensar “nos” a favor de otro(s), siempre y cuando le ponga cuidado a los impulsos milagrosos (o amorosos) que de vez en cuando emergen de su subconsciente. 2) Luego, pensando cada vez más “nos” —que es el sistema de pensamiento del Espíritu Santo— lo llevará también cada vez más a perdonar al otro(s) y a extenderle(s) los milagros que el mismo Espíritu Santo le sugerirá. 3) Al multiplicarse estas experiencias, querrá creer que constituyen aquí un reflejo del eterno Amor de Dios por Su Hijo único —Que realmente son todas nuestras Almas fusionada en Una sola en Cristo— y que curará en su mente —ahora acertada— todo pesar y dolor, todo miedo y toda pérdida, que creía que eran reales, y que sufría debido a la lealtad que les profesaba. Ver T6.6.3 [94], T7.5, T11, T14, T22, T23.2 [13], T29.8, T31, L39, LTe.2 (-L231)
 
6 … en el espíritu, la parte de nuestra mente separada que aún se mantiene en contacto con Dios por medio del Espíritu Santo, y cuyos pensamientos procesamos con la parte de nuestro cerebro que es capaz de compasión y de compartir.
 
7 Voluntad de Dios en el eterno Presente de Su Unicidad en la Que todas nuestras Almas perfectas están fusionadas en Una sola en Cristo, Su Hijo único, Dios— quiere que la felicidad que Su Hijo heredó de Él siga imperturbada y perpetua en la Alegría de la Creación plena, eternamente receptiva y totalmente ilimitada en Él. Aquí, la Voluntad de Dios es, por medio del perdón y de la extensión de milagros, que nos volvamos el reflejo de ese eterno Presente de la Unicidad, en la Que, en paz y con alegría, nos amamos unos a otros como uno en Cristo, el Hijo único de Dios, Quien es Uno con Él. Ver T12.7 [64] y [65], T13.5 [41], L193 
 
8 Universo, con mayúscula, es sinónimo de la Unicidad de Dios, Cielo, Reino de los Cielos, Realidad, es decir, Todo lo creado por Dios, a saber: Nosotros como Almas perfectas, fusionadas en Una sola en Cristo, Su único Hijo. Aquí, en minúscula, universo puede significar todo lo que está contenido en el tiempo y el espacio según el ego o, si estás pensando con el Espíritu Santo, es el reflejo aquí de la Unicidad de Dios. Ver T28.3 [16], T29.7 [39]
T19.5.1 PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE
DE LA PAZ
pár 43-44
T19.5.1 [43] 26 ¿Rechazarían la salvación que les ofrece el Dador de la salvación? 27 Pues en eso es en lo que se han convertido. 28 La paz no sería más capaz de abandonarlos que abandonar a Dios. 29 No tengan miedo de este pequeño obstáculo, 30 pues no puede frenar la Voluntad de Dios. 31 La paz se desbordará por encima de él, y se unirá a ustedes sin impedimentos. 32 La salvación no les puede ser negada. 33 Es el propósito de ustedes. 34 No pueden decidir otra cosa que no sea ésta. 35 Realmente no tienen ningún propósito fuera del que tienen uno para el otro, ni ninguno fuera del que pidieron al Espíritu Santo que compartiera con ustedes. 36 ¡Es que el pequeño muro va a derrumbarse tan silenciosamente por debajo de las alas de la paz! 37 Pues la paz enviará los mensajeros de ustedes por todo el mundo. 38 Y las barreras caerán ante su llegada con la misma facilidad con la que superará las que ustedes quieran interponer.

T19.5.1 [44] 39 Vencer al mundo no es más difícil que superar el pequeño muro de ustedes. 40 Pues en el milagro de su relación —una vez liberada de esa barrera— se encuentra cada milagro. 41 No hay grados de dificultad en los milagros, pues todos son realmente iguales. 42 Cada uno supone una tranquila victoria de la atracción del Amor sobre la de la culpa. 43 ¿Cómo se puede fallar en esto, dondequiera que se emprenda? 44 La culpa no puede levantar barreras reales contra el Amor9. 45 Y todo lo que parece interponerse entre ustedes tiene que derrumbarse debido a la petición que ustedes respondieron. 46 Y por haber respondido, El que les contestó quiere llamar. 47 Su hogar reside en la relación santa de ustedes. 48 No traten de interponerse entre Él y Su santo propósito, pues es también el de ustedes. 49 Al contrario, déjenlo que extienda tranquilamente el milagro de la relación de ustedes a todos los que están incluidos en ese propósito, tal como fue dado.
9 En el Cielo, según el Curso, no hay normas ni culpa, ya que Dios sólo sabe del Amor que comparte en paz y alegría con Su Hijo único, Que somos todos nosotros, como Almas perfectas y eternas, fusionadas en Una sola en Cristo, en el eterno Presente de Su Unicidad. Aquí, donde reina la imperfección de los cuerpos regidos por las leyes de la evolución y escasez, cuando pensamos con el ego, la culpa es el sentimiento de no haber estado a la altura de las circunstancias, o de haber faltado contra normas generalmente cambiantes que rigen nuestras vidas. Pero, cuando decidimos identificarnos con nuestra Alma (o Espíritu) y pensamos con el Espíritu Santo, queremos creer que realmente no somos cuerpos sino el único Hijo de Dios, de Quien nunca nos hemos separado. Además, mediante la visión de Cristo, ahora vemos a las faltas que antes juzgábamos como imperdonables, como errores subsanables por medio del perdón y de la extensión de milagros y, de esa manera, ser aquí el reflejo de lo que realmente somos: el Hijo único, que ama a Dios y es amado por Él en la alegre Concordia del Amor o Espíritu Santo, como era antes de que el tiempo pareciera existir. Ver T5.8 [73], T12, T13.3, T14.2, T16.6, T19.5.1.1
T19.5.1 PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE
DE LA PAZ
pár 45-46
T19.5.1 [45] 50 En el Cielo reina un silencio, una feliz expectativa, un leve respiro alegre, al reconocerse que el viaje ha terminado. 51 Pues el Cielo los conoce bien, tal como ustedes realmente conocen el Cielo. 52 Ahora, ninguna ilusión se interpone entre ustedes. 53 No miren el pequeño muro de sombras10. 54 El sol se ha elevado por encima de él. 55 ¿Cómo puede una sombra impedirles que vean el sol? 56 De igual modo, tampoco se les puede mantener en las sombras, alejados de la luz en la que a las ilusiones les llega su fin. 57 Todo milagro11 no constituye sino el final de una ilusión. 58 Tal fue el viaje; tal su final. 59 Y en la meta de la Verdad12 que aceptaron, a todas las ilusiones les llegará necesariamente su fin.

T19.5.1 [46] 60 El insignificante y alocado deseo13 de deshacerse de Aquel Que invitaron a entrar y de expulsarlo tiene necesariamente que generar conflicto. 61 A medida que observan el mundo, ese insignificante deseo, desarraigado y flotando a la deriva, puede llegar a posarse brevemente sobre cualquier cosa, pues ahora no tiene ningún propósito. 62 Antes de que el Espíritu Santo entrara a morar con ustedes, ese deseo parecía tener un magno propósito: la dedicación fija e inalterable al pecado y a sus resultados14. 63 Ahora deambula sin rumbo, vagando a la deriva, causando tan sólo mínimas interrupciones en la atracción que ejerce el Amor.
10 … que el ego siempre percibe, como parte de su sistema de pensamiento
 
11 Extender un milagro a otro, es la máxima expresión de Amor que puedes experimentar en tu fuero interno, cuando, después de haber aceptado el Redimir para ti mismo y logrado perdonar totalmente a un hermano, se corre el velo que te impedía verlo con la visión de Cristo, y fusionas tu Alma con La de él en una unión de Amor, en la que dar es recibir, que se extiende a todas las Almas, ya que, realmente, hay Una sola, La del Hijo único de Dios. El milagro trasciende las leyes de este mundo, remplazándolas por una verdadera empatía o altruismo, como reflejo aquí del Amor que nuestras Almas comparten en el Cielo, reflejo que cura la mente de tu hermano de su creencia en la realidad del ego y, al mismo tiempo, consolida tu propia curación. El milagro es el medio para alcanzar conjuntamente la meta del Curso, no se pide, sino que sucede y, al suceder, se acepta que su origen es divino, mediante un acto de fe. Ver: T1, Te.13 (-L341)
 
12 Mundo real, es la meta de nuestro viaje con el Curso. Es el estado mental que, inicialmente, se experimenta cuando se logra perdonar totalmente a otro y fusionamos su Alma con La nuestra en la experiencia de Cristo. Luego, al perdonar una y otra vez totalmente a otros, vamos a querer extender esa experiencia de Amor a todo y a todos — como en un reflejo aquí del eterno Presente de la Unicidad, donde todo es Uno en Dios— en la espera que Dios dé el paso final. Ver T1.1.19 [19], [45] y [48], T2.2 [20], T30.6 [63], T31.1 [9] Lte.8 (-L291) Lte.8 (-L291)
 
13 … de nuestro ego y su sistema de pensamiento,
 
14 … dedicados a sobrevivir a como dé lugar, a posesionarse lo más arriba posible en la jerarquía humana del poder y de la posesión y disfrute de las escasas cosas "buenas" que ofrece transitoriamente el mundo,
T19.5.1 PRIMER OBSTÁCULO:
EL DESEO DE DESHACERSE
DE LA PAZ
pár 47-48
T19.5.1 [47] 64 Este deseo cual pluma al viento, esta diminuta ilusión, este residuo microscópico de la creencia en el pecado, es todo lo que queda de lo que una vez pareció ser el mundo. 65 Ya no es una implacable barrera a la paz. 66 Su inútil deambular hace que sus resultados parezcan más erráticos e impredecibles que antes. 67 No obstante, ¿qué podría ser más inestable que un sistema ilusorio rígidamente organizado? 68 Su aparente estabilidad no es otra cosa que su siempre presente debilidad, que lo abarca todo. 69 La variabilidad que este ínfimo residuo produce indica simplemente cuán limitados son sus resultados.

T19.5.1 [48] 70 ¿Cuán poderosa puede ser una diminuta pluma ante las inmensas alas de la Verdad15? 71 ¿Puede acaso oponerse al vuelo de un águila o impedir el avance del verano? 72 ¿Puede interferir en los efectos que el sol veraniego produce sobre un jardín cubierto de nieve? 73 Vean con cuánta facilidad se puede recoger este pequeño vestigio y llevarlo a lo lejos para que nunca vuelva, y despídanse de él con alegría y no con pesar. 74 Pues de por sí no es nada, ni apoyaba nada cuando tenían mayor fe en su protección. 75 ¿No preferirían darle la bienvenida al cálido sol veraniego en lugar de poner su atención en un copo de nieve que se está derritiendo, y tiritar recordando el frío del invierno?
15 La Verdad, con mayúscula —que realmente no soy un cuerpo sino un Alma, Tal como Dios me creó— según el Curso, no se puede describir ni tampoco explicar; sólo puede experimentarse en nuestro fuero interno, en un instante santo del mundo real, al haber logrado perdonar totalmente a otro y haber visto su Alma con la visión de Cristo. En esto radica aquí, la paz de Dios. En minúscula, es la verdad del ego, cuyo sistema de pensamiento está basado en la percepción de que el tiempo y el espacio y el universo son reales, están regidos por las leyes de la evolución y escasez, y constituyen la única y verdadera realidad. Ver T7.5, T14, T30.5
Horario actual de
Un Curso sobre Milagros – Preliminares

COMPRAR:
or COMPRAR aquí
en la tienda CIMS:

 PDF GRATUITO de los Principios De Los Milagros aquí
COURSE IN MIRACLES SOCIETY
(Sin ánimo de lucro)
Donar
En la actualidad, todos los proyectos CIMS están respaldados por donaciones de tiempo libre, talento y dinero. Si desea apoyar alguna de las actividades de la Sociedad de alguna manera, no dude en ponerse en contacto.

Debido al carácter internacional de CIMS, Internet es nuestro principal medio de comunicación y colaboración.

Para hacer una donación deducible de impuestos en apoyo de las lecciones diarias, haga clic aquí.

Además, por medio de su testamento u otro plan de sucesión, puede nombrar "Curso en la Sociedad de Milagros" como el beneficiario de una parte de su sucesión, o de activos particulares en su sucesión. De esta manera, está honrando a sus seres queridos y al mismo tiempo brinda un apoyo crítico a la extensión de LOVE.

DONAR to OTROS PROYECTOS
CIMS | 800-771-5056 | reja-joy@jcim.net | jcim.net